Muy a menudo, es uno de los detalles que recuerda la gente.
Además, quedarse sin pan que servir a los últimos clientes
es impensable.
Por consiguiente, están obligados a comprar más de lo necesario
y a tirar la mayor parte para tener siempre pan fresco que servir
a sus clientes.
Ya no hace falta tirar pan y siempre tendrán pan fresco
y caliente que poner en la mesa.
Con una capacidad de cuatro barras al mismo tiempo, podrán
enfrentarse incluso a las horas punta.